- La sal es necesaria para la vida humana, pero esta debe ser consumida de manera moderada.
- La OMS aconseja la ingesta diaria de hasta 5 gramos.
- Exagerar con el consumo de sal contribuye al desarrollo de hipertensión arterial, problemas cardiovasculares e insuficiencia renal.
Con el lema: “Limita la sal oculta” se conmemora en la fecha la Semana Mundial de la Sensibilización sobre la Sal 2016, a través de la cual se pretende concienciar a la población sobre la importancia de la reducción del consumo de sal en la alimentación diaria, y alentar a la vez, a la industria alimentaria para actuar de manera más responsable y reducir la cantidad de sal que agregan a los alimentos procesados y ultraprocesados.
En los países donde el consumo de alimentos procesados es alto y donde las dietas tradicionales tienen un alto contenido de sal, la ingesta total de sal es muy elevada. Según datos del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, el consumo de sal en la población paraguaya adulta es de 13 gramos al día, lo cual prácticamente duplica las recomendaciones de la OMS, de 5g de sal por día.
La sal y el sodio se usan indistintamente, pero no son exactamente lo mismo. El sodio es un mineral que se produce naturalmente en los alimentos o se añade durante la fabricación o ambos. La sal de mesa es una combinación de sodio y cloruro. En peso, se trata de 40 por ciento de sodio y 60 por ciento de cloruro.
El sodio se encuentra naturalmente en algunos alimentos y, a menudo se añade durante la elaboración. Además, se agrega en forma de sal durante la cocción y en la mesa. El sodio de origen natural se encuentra en alimentos como el apio, la remolacha y la leche. Los alimentos envasados y preparados, como las sopas, los productos enlatados, los embutidos, los quesos, el pan y las comidas congeladas, a menudo tienen sodio agregado durante la fabricación. Este sodio podría ser en forma de sal u otras formas de sodio (como bicarbonato de sodio y otros conservantes). Se debe limitar el consumo de estos alimentos y a la hora de realizar las compras, leer las etiquetas de los productos.
El alto consumo de sal aumenta la presión arterial, un importante factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares (derrame, infartos). Por otra parte, según demuestra la evidencia, los alimentos conservados en sal o con grandes cantidades de sal añadida, son probablemente una de las causas del cáncer de estómago.
Otros riesgos para la salud debidos al alto consumo de sal: osteoporosis, enfermedad renal, piedras en el riñón, dolores de cabeza.