- Analizaron nuevos enfoques en la lucha contra la enfermedad.
- Vacuna contra el Dengue es vista como estrategia adicional de control y prevención.
Más de un centenar de expertos y actores clave en salud pública se reunieron recientemente en Río de Janeiro, Brasil, para participar del Simposio Regional de Dengue, convocado por el Instituto de Vacunas Sabin (Sabin), la Iniciativa para una Vacuna contra el Dengue (DVI, según sus siglas en inglés) y la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), con el objetivo de colaborar en la identificación de acciones comunes para la reducción de la morbilidad y mortalidad del virus en la región.
En representación del Ministerio de Salud de Paraguay participó la Viceministra de Salud Pública, Dra. María Teresa Barán y la Dra. Águeda Cabello, de la Dirección General de Vigilancia de la Salud.
Los asistentes compartieron sus investigaciones y conocimientos técnicos, proporcionando una oportunidad única para promover el conocimiento científico para todos los socios con el fin de apoyar a los gobiernos en sus decisiones sobre la integración de vacunas contra el dengue en las estrategias de prevención y control existentes.
“A pesar de los grandes esfuerzos de los países para prevenir el dengue y controlar al mosquito vector en la última década, la enfermedad sigue siendo un problema de salud pública en las Américas”, señaló el doctor José Luis San Martín, asesor regional de la OPS/OMS sobre el dengue, quien consideró este encuentro como una oportunidad para fortalecer las estrategias de prevención y control de esta enfermedad.
“El enfoque de la prevención y control del dengue debe ser basado en la evidencia y reflejar la apropiación de los países”, dijo el doctor De-Kyu Yoon, director de DVI. Indicó que mediante el Simposio se promueve el intercambio de lecciones entre los países de la región. Continuará sentando las bases para la toma de decisiones acerca de la introducción de vacunas en las Américas y alrededor del mundo”.
El Simposio Regional de Dengue, el primero de su tipo organizado conjuntamente por la OPS/OMS, el Instituto de Vacunas Sabin y la DVI, hizo una revisión de los enfoques tradicionales y nuevos en la lucha contra el dengue. Reunió asimismo las perspectivas de todos los socios involucrados: los expertos en salud mundial, los profesionales de salud pública y los responsables políticos de los países donde el dengue es endémico en las Américas y a representantes de empresas que desarrollan tecnologías de control de vectores y vacunas. La inclusión de las partes interesadas en todos los sectores y disciplinas busca fortalecer la conversación sobre los retos futuros para la eliminación del dengue.
En este contexto, una vacuna contra el dengue es vista como una herramienta adicional valiosa para la prevención y el control integrado del dengue.
Varias vacunas candidatas están en desarrollo. En 2014, se completó la primera fase III de ensayos para una de ellas que demostraron una eficacia general del 61% en América Latina (57% en Asia). En julio de este año, el Grupo Técnico Asesor (TAG) sobre Enfermedades Prevenibles por Vacunación de la OPS reconoció los avances alentadores en vacunas, pero señaló que no había pruebas suficientes para hacer una recomendación sobre la introducción de la vacuna en ese momento. Mientras tanto, otros cinco candidatos a una vacuna tetravalente (que protege simultáneamente contra los cuatro virus del dengue) continúan progresando en sus ensayos clínicos.
Se estima que unos 2,5 millones de personas viven en más de cien países endémicos y áreas donde los virus del dengue se pueden transmitir; se trata de la enfermedad transmitida por vectores de más rápido crecimiento del mundo.
El dengue causa fiebre con dolor de cabeza, erupción cutánea y dolores musculares debilitantes y en las articulaciones. Las complicaciones incluyen hemorragias, shock, coma o la muerte y con frecuencia requieren hospitalizaciones, que causan una carga importante en los sistemas de salud pública. Esto es especialmente preocupante para los países de bajos y medianos ingresos, donde se producen con frecuencia brotes. Solo en las Américas, los costos asociados con el dengue se han estimado en más de 2 mil millones de dólares.