- Para comprobar que el estudiante se encuentra en condiciones para la práctica de actividad física y deportes.
- También es importante la consulta oftalmológica y odontológica como medida preventiva.
- Estar al día con el esquema de vacunación.
- Verificar que estén libres de liendres.
Ante la llegada del periodo escolar, el Ministerio de Salud Publica aconseja a padres y/o tutores llevar a los niños para realizarse los chequeos médicos correspondientes, a los efectos de prevenir situaciones que podrían significar un riesgo para la salud.
Para la práctica de actividad física, la inspección médica es de carácter obligatorio. Con esto se verifica si el estudiante está apto o no para realizar ejercicios físicos y deportes, o si debe practicarlos bajo ciertas restricciones.
También es importante el control oftalmológico. En la etapa de la infancia se detectan las principales afecciones oculares. Lo ideal es visitar al oculista al menos una vez al año, como medida preventiva. La salud bucodental igualmente debe ser contemplada en el cuidado de la salud, a fin de impedir caries y otras infecciones que pueden afectar el bienestar del infante.
Verificar que el esquema de vacunación este actualizado. La vacuna constituye una protección contra las enfermedades y complicaciones que ellas puedan generar. Servicios dependientes de la cartera sanitaria disponen de vacunas para la prevención de múltiples patologías; son seguras y gratuitas.
Por otra parte, se recomienda antes del regreso a clases, asegurarse que los niños estén con la cabeza libre de liendres, cuenten con las uñas limpias y cortas, de manera a impedir que enfermedades, como las gastrointestinales.
Para mantener la salud del escolar es fundamental que la carga de la mochila no sobrepase el 15% del peso total del mismo, de modo a evitar dolores musculares y mala postura corporal.
Alimentación saludable para niños sanos
Es importante que los niños desayunen antes de asistir a clases.Saltarse u omitir el desayuno puede ser contraproducente para la salud, dando lugar a mareos, náuseas, dolor de cabeza, sueño y falta de concentración.Como primera comida del día se sugiere consumir al menos una taza de leche con una porción de panificado o cereal.
A mitad de jornada, una merienda es ideal para que el niño o adolescente pueda recargar las baterías. Como opción saludable se puede incluir: una fruta o yogurt con cereal, o una porción de sándwich de queso o de verduras que puede ir acompañada si lo prefiere, con jugo de fruta de estación.