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Feb 08

Enfermos crónicos pueden desarrollar la fase grave de Chikungunya

  • Principalmente los que padecen Artritis, EPOC o distrofia musculares.
  • Es necesario disminuir el riesgo de dispersión mediante la eliminación de criaderos.
  • Tratamiento se realiza de manera ambulatoria, excepto si se da en su fase crónica.

Doctor examining a lung radiographyFiebre muy alta, generalmente acompaña de dolores articulares y musculares, de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas, son síntomas que se presentan en un paciente con Chikungunya.

Los dolores articulares pueden ser muy debilitantes, pero la mayoría de los pacientes se recuperan totalmente. Sin embargo, en algunos casos, la afectación de las articulaciones puede persistir de manera crónica, aunque las complicaciones serias no son frecuentes, en el caso de adultos mayores, niños/as y embarazadas la enfermedad puede agravarse y causar la muerte.

Dentro de este grupo de riesgo, se hace énfasis en aquellas personas que sufren enfermedades crónicas debilitantes, tales como Artritis, Enfermedades Pulmonares Obstructivas Crónicas (EPOC) o distrofia muscular; siendo necesaria la prevención de manera a evitar en lo posible que este grupo pueda contraer la enfermedad.

En el 98% de los casos el tratamiento es ambulatorio. Como los dolores son intensos, se debe guardar reposo en cama, de preferencia usando mosquitero.

La fiebre y el calor ambiental hacen que se pierda agua del cuerpo, lo que hace necesario tomar líquidos en abundancia. Entre 2 a 3 litros por día en los adultos y en los/as niños/as continuamente, a voluntad. Se debe tomar agua, sopas y jugos de frutas.

Se debe evitar la deshidratación que puede llevar a complicaciones. Por eso se recomienda controlar la fiebre, guardar reposo y tomar abundante agua. En los/as niños/as y adultos se puede bajar la fiebre también por medios físicos, con paños en el cuerpo con agua a temperatura ambiente, o baños en ducha o tina sobre todo cuando la fiebre está por encima de los 39 grados centígrados.

Medidas preventivas

La prevención y el control se basan en gran medida en la reducción del número de depósitos de agua natural y artificial que puedan servir de criadero de mosquitos. Evitar tener agua empozada en la casa; como floreros y tanques sin tapar.

Es necesario movilizar a las comunidades afectadas por criaderos cercanos.

Los insecticidas pueden ayudar a matar los moquitos en vuelo. Asimismo, se pueden eliminar al aplicar repelente en las superficies o alrededor de los depósitos donde se posan los mosquitos, así como también en las aguas tratadas en contenedores para matar las larvas.

Es importante aplicar repelente en la piel o en la ropa, respetando estrictamente las instrucciones de uso del producto.

También se recomienda usar mosquiteros para quienes duerman durante el día, sobre todo los/as niños/as pequeños/as, los enfermos y personas mayores. Asimismo, utilizar mallas protectoras en puertas y ventanas.

Los repelentes en espirales y los vaporizadores de insecticidas también pueden reducir las picaduras en ambientes de interiores.