- El procedimiento de alta complejidad se llevó a cabo en el INERAM, servicio dependiente del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
- El pequeño, oriundo de Ciudad del Este, se encuentra en excelentes condiciones de salud y estará en observación por 72 horas.
- Recomiendan a madres y padres de familia que niños menores de 4 años no tengan a su alcance objetos y/o juguetes más pequeños que el tamaño de la boca, para evitar atragantamientos y aspiración de cuerpos extraños.
Este viernes, en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (INERAM) “Juan Max Boetner”, se llevó a cabo una broncoscopia rígida a fin de extraer una hebilla alojada en el bronquio derecho de un niño de un año de edad.
El pequeño, oriundo de Ciudad del Este, había aspirado el cuerpo extraño, y de urgencia fue trasladado hasta la capital del país para este procedimiento de alta complejidad.
Según el reporte del equipo médico interviniente, encabezado por el neumólogo Carlos M orínigo, la intervención fue un éxito y el niño se encuentra en excelentes condiciones de salud. Como se trata de un asegurado de IPS, el paciente ya fue trasladado al hospital central, en donde quedará bajo observación por 72 horas. Cabe señalar que todos los gastos de intervención corrieron por cuenta del INERAM, en cuanto a insumos y medicamentos.
Desde este servicio de la cartera sanitaria, también informaron sobre la atención a otro niño, de 10 años, proveniente de Encarnación, quien aspiró un silbato. Debido a la ubicación y tamaño del objeto, el equipo médico realizó un primer procedimiento consistente en ablandar la zona para luego extraerlo, el martes próximo.
El equipo médico interviniente está conformado por:
- Dr. Carlos Morínigo, neumólogo.
- Dra. Jesica Fernández, neumóloga.
- Rodney Dávalos, anestesista.
- Lic. Angela Gutiérrez, instrumentadora quirúrgica.
Recomendaciones de los profesionales
Los médicos aconsejan a madres y padres de familia cuidar que las niñas y niños menores de 4 años no tengan a su alcance objetos y/o juguetes más pequeños que el tamaño de la boca, a fin de evitar atragantamientos y aspiración de cuerpos extraños.