- Es decir, a personas con patologías de base. Deben contar con la dosis antigripal para prevenir cuadros graves de influenza.
- Es necesario abrigar más a niños/as y a personas de la tercera edad.
- Consultar ante síntomas de gripe o resfrío. No auto-medicar.
El neumólogo Carlos Morínigo explica que las bajas temperaturas afectan a personas con patologías de base, como las asmáticas, alérgicas, a aquellas con enfermedades pulmonares obstructivas crónicas; y adultos mayores con diabetes e insuficiencias cardiacas.
“Insistimos en que se vacunen contra la influenza, que abriguen a los chicos y a los adultos mayores”, remarca el profesional.
La vacuna antigripal ayuda a que, si se adquiere el virus influenza, afecte con menor fuerza, lo que evita que se desencadenen otras patologías. “Existe un tabú con la gente que piensa yo me apliqué la vacuna, pero me hizo mal”, enfatiza.
Ante los primeros síntomas de gripe, es necesario consultar con el médico, de manera a evitar enfermedades de mayor importancia, y guardar reposo. Así también, se debe usar la flexura del codo para cubrirse al toser o estornudar.
Diferencia entre gripe y resfrío
Los resfríos son causados por virus más benignos, que provocan dolor de garganta, tos y otros síntomas leves. La gripe, por su parte, provoca fiebre elevada, dolores musculares, postración, dolor al tragar la saliva, tos y dificultades respiratorias, según puntualiza Morínigo.