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Nov 18

Hermanos prematuros: “La vida es un desafío, luchando todo es posible”

  • Es la filosofía de vida que adoptaron Nilsa y José, hermanos, compinches y con una historia en común, nacieron prematuros.
  • Ella quedó invidente, producto de la prematuridad. Hoy es licenciada en psicología, formó una familia y tiene dos hijos.
  • Él se convirtió en fisioterapeuta y vive una vida plena y saludable.

IMG_7827José y Nilsa Mendoza son hermanos. Además de estar unidos por un lazo de sangre, ambos comparten una historia en común, nacieron de manera prematura, con una diferencia de edad de tres años.

“A la edad de 23 años mi madre se encontraba embarazada. Esperaba a mi hermana Nilsa”, relata José. Comenta que a raíz de la pérdida de sangre que experimentó su mamá a escasas semanas de gestación, el médico le indicó reposo absoluto, cosa que no cumplió debido a que tenía que trabajar para subsistir.

A raíz de esto la mujer sufrió otra pérdida de sangre, hecho que la llevó nuevamente a la consulta médica. En la oportunidad, el médico tratante le anunció que su bebé nacería antes de tiempo. Mediante parto normal vino a este mundo Nilsa, pesando 1.300 gramos. La recién nacida tuvo que ser ingresada a terapia donde se le brindaba cuidados especiales y era alimentada por sonda.

Luego de dos meses y medio de internación (75 días), Nilsa fue dada de alta. Logró aumentar medio kilo, llegando a tener un peso total de 1.800 gramos.

Tres años después, a la edad de 26 años la joven madre consiguió estar nuevamente en la dulce espera. “Nací con la misma condición prematura que mi hermana, a las 28 semanas de gestación, con un peso de 1.850 gramos. Fui hospitalizado por espacio de 20 días donde me sometieron a un control estricto. Al cabo de ese lapso me dieron el alta médica”, señaló el joven.

Porque los milagros de vida existen, hoy día los hermanos Mendoza viven una vida plena y feliz. Ella quedó invidente, producto de la prematuridad. Pero eso no fue una barrera para cumplir su sueño de ser una profesional y formar una familia. Hoy Nilsa cuenta con 33 años, es licenciada en psicología, formó una familia y tiene dos hijos. En tanto que José, con 30 años se desempeña como fisioterapeuta.