- Su exceso contribuye al desarrollo de hipertensión, problemas cardiovasculares, insuficiencia renal y muerte súbita.
- La ingesta diaria de sodio debe ser de solo 5 gramos, pero la población consume tres veces más.
Exagerar con el consumo de sal puede traer graves consecuencias al organismo. Se recomienda que la ración diaria de sodio (sal) sea de hasta 5 gramos, “pero sin embargo, la población consume tres veces más de lo permitido, entre 12 a 15 gramos, lamentó la Dra. Patricia Calderini, coordinadora de la Dirección de Enfermedades No Transmisibles.
“Esto hace que un 30% de estas personas puedan dar lugar al incremento de presión arterial o hipertensión, principal factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, que generan a su vez muertes súbitas y prematuras. A raíz de esto mucha gente fallece antes de tiempo, a edades muy tempranas. De ahí la importancia de tomar conciencia”, sostuvo la profesional médica.
Explicó que la obesidad está estrechamente relacionada con el consumo de sal en demasía. La ingesta desmesurada de sal en las comidas puede incluso generar osteoporosis, insuficiencia renal, gastritis, en este último caso facilitar el desarrollo de cáncer de estómago.
Este mal hábito puede contribuir igualmente a la retención de líquido en el cuerpo, lo que produce un aumento de peso. Facilita la formación de cálculos o piedras a nivel renal. En los asmáticos la sal hace que aumente la crisis de asma.
Calderini mencionó que todos los alimentos contienen en alguna medida algo de sodio. “Los embutidos, quesos duros, productos enlatados, panificados y la salsa de soja contienen una cantidad importante”, aseguró, por lo que aconseja elegir productos con menor porcentaje de sodio.
La coordinadora de Enfermedades Transmisibles señaló que la rebaja de la ingesta de sal en las comidas puede realizarse de forma progresiva, puesto que las papilas gustativas tardan unas dos semanas en acostumbrarse a un nuevo sabor.
Explicó que la disminución de sal en las comidas debe iniciarse desde la niñez, a fin de impedir la aparición de enfermedades en la edad adulta.
Para disminuir el consumo de este mineral recomienda:
1) Elegir productos frescos: frutas y verduras;
2) Colocar la sal recién al finalizar la cocción de los alimentos.
3) No colocar saleros en la mesa para evitar agregados innecesarios de sodio.
4) Hacer uso de condimentos naturales como albahaca y limón.