- Barrios Obrero fortalece estrategias de prevención de la enfermedad.
- Instan a la comunidad a colaborar con limpieza en sus hogares.
Brigadas de funcionarios del SENEPA y del Hospital Barrio Obrero se unieron para efectuar un control en el predio del Centro Sanitario, y visitar viviendas de unas 40 manzanas colindantes al hospital.
Exhortaron a los propietarios a controlar sus patios, eliminar los criaderos de mosquitos y desechar agua acumulada y recipientes en desuso.
El Dr. Silvio Ortega, director del SENEPA, señaló que esta iniciativa busca que los establecimientos estén libres de criaderos a fin de reducir los riesgos de transmisión de ambas enfermedades en hospitales.
Por su parte el Director General del Hospital, Dr. Julio Rolón, dijo que estas actividades deben replicarse en hospitales y centros dependientes del Ministerio de Salud.
Asimismo, subrayó que durante las visitas domiciliarias insisten en las actividades preventivas y la necesidad de cuidar la salud de la familia y del entorno, considerando que con cada lluvia, todo comienza prácticamente de cero.
En ese contexto, la cartera sanitaria recuerda algunos objetos que pueden convertirse en fuente de cría de larvas, a fin de que sean identificados y erradicarlos del hogar.
Criaderos en el interior de la casa (intradomiciliarios)
Floreros, portamacetas, jarrones, botellas retornables, desagüe de refrigeradores, inodoros que no se utilizan.
Recipientes descartables, frascos, botellas, macetas, latas, neumáticos, tanques, tambores, toneles, tanques elevados, plantas de hoja ancha (bromelias, banano), canaletas de desagüe, plantas acuáticas, vidrios en la pared, ladrillos huecos, bloques, huecos en paredes (bloques).
Artificiales inservibles
Cubiertas a la intemperie, baterías viejas, carrocerías y piezas de automotores, baterías, latas, botellas o frascos de diverso tipo, juguetes viejos a la intemperie, baldes, tarros, materiales de construcción, cáscaras de huevo, coco u otras, botas de goma en desuso.
Peridomiciliario
Para la identificación y eliminación de estos potenciales criaderos, se necesita invertir 10 minutos diarios en la revisión de la vivienda.