Afirma Sonia Arza, titular del Programa Ampliado de Inmunizaciones del MSP.- Se envían avisos a través de las escuelas para que padres y madres autoricen la vacunación de quienes la requieran.
- Existe brote importante de Sarampión en Brasil. Con una población vacunada se podrá evitar la reintroducción de esta grave enfermedad al territorio nacional.
“Nosotros no solamente nos preocupamos sino que nos ocupamos de que las vacunas lleguen a la población, no vamos a dejar a ningún niño sin su esquema de vacunación completo”, afirma la Dra. Sonia Arza, directora del Programa Ampliado de Inmunizaciones del Ministerio de Salud.
La referente sostiene que Salud Pública y el MEC trabajan en conjunto y de manera intensificada en la presente Campaña Nacional de Vacunación, que apunta a llegar no solo a la franja infantil sino a toda la comunidad educativa. “Estamos enviando avisos a los padres a fin de que den su autorización para regularizar el esquema de vacunación de sus hijos/as”, señala.
Puso en relieve la situación que atraviesa Brasil, en cuyo territorio hace tiempo circula el virus del Sarampión. “Actualmente existe un brote imparable en el norte del Brasil y esto preocupa a la Organización Mundial de la Salud”, refiere al tiempo de enfatizar que, si el vecino país no detiene el virus, puede encender de manera mundial.
Agrega que este mismo año, en Disneylandia (EE.UU.) ingresó el virus importado, encontró a una población sin protección y por eso se diseminó en cinco estados diferentes.
“Situaciones como éstas se dan porque existen poblaciones que no están vacunadas, lo que no se da en Paraguay y no lo digo yo, eso está certificado por la OPS/OMS”, sostiene Arza, destacando que a la par de este logro al que se llegó el año pasado, no se bajó la guardia y se insiste a la población en que el mayor desafío es mantener ese estatus de Paraguay como zona libre de Sarampión y Rubéola.
Si bien es cierto, la profesional reconoce que hace unos años en nuestro país hay un mejor apego a la vacunación, después de lograr el fortalecimiento del Programa Regular con la introducción de cuarto nuevas vacunas, el arraigo a la prevención aún es débil. “Se pasan vicisitudes para poder vacunar, se tiene que convencer al papá o a la mamá para que vacunen a sus hijos/as”, remarca.
Agrega que, si se presentan situaciones de negación de padres y/o madres, se les insiste y se llega a ellos de diferentes maneras, a través del educador/a comunitario, de sacerdotes y otros miembros de la comunidad. “En caso de que no autoricen después de toda esta tarea, se denuncia a la CODENI, desde donde se lucha por el bienestar del niño/a”, indica la profesional.
La inversión en prevención
Paraguay invierte 42 millones de dólares en este campo, según lo destaca la titular del PAI. “Hoy en día pueden vacunarse desde un recién nacido hasta personas de la tercera edad y, a diario, se suma más gente que acompaña esta causa”, indica.
Además, afirma que la OPS/OMS valora la política pública en inmunización de nuestro país. “Paraguay no tiene nada que envidiar a los esquemas de primer mundo”, refiere Arza, señalando que la población debe saber que si se vacuna a tiempo y aprovecha su esquema fortalecido de vacunación evitará complicaciones y muertes.
El impacto de este trabajo preventivo se verá a largo plazo, a decir de la profesional, quien sostiene que los/as niños/as que se están formando ya van a educarse en la línea de la prevención y, cuando se conviertan en adultos, autónoma e inmediatamente se acercarán a los vacunatorios.
Por último, reivindica el trabajo del vacunador/a. “Es importante destacar en capital y área metropolitana, pero imagínense llegar al Alto Chaco, esa vacuna llega a la comunidad y eso hay que reivindicar”, expone finalmente la Dra. Sonia Arza.
