• Software permite realizar mejor clasificación de pacientes, según gravedad.
El área de “Urgencias” del hospital pediátrico “Niños de Acosta Ñu”, cuentan con software que permite realizar mejor clasificación de pacientes para ser atendidos de acuerdo a la gravedad. Las secciones de recepción, enfermería y consultorio trabajan en redes. La tecnología permite agilizar el proceso de atención y disminuir margen de error.
El primer software fue donado por la OPS, este brinda detalles a tener en cuenta para realizar un buen Triage; la enfermera controla cada parámetro como temperatura y otros síntomas, lo introduce al sistema informático y este hace lectura del nivel de urgencia. El segundo software fue desarrollado e implementado por la Lic. Lourdes Vera, analista de sistema del hospital, su creación hace posible trabajar en redes desde que el paciente llega a admisión, pasa por enfermería hasta llegar al médico responsable de la atención.
La Dra. Viviana Pavlicich, jefa de urgencias, explica que fue un trabajo evolutivo, “al principio se trataba de un proceso rudimentario, se utilizaban estrategias simples que fue complejizándose con el tiempo. Las urgencias son lugares donde pueden ocasionarse situaciones no deseadas. Por eso la organización del sistema logra que los errores disminuyan”, subraya.
Buscando salir del antiguo sistema de atenciones por orden de llegada, la Dra. Pavlicih fue hasta España, país que había adaptado el modelo canadiense de clasificación de pacientes. Desde ese sitio, la pediatra trabajó y logró adaptar al sistema de atención en Paraguay, específicamente para la atención a niños/as.
Sistema de atención
En la computadora aparece una serie de factores discriminantes que se entrecruzan para tener en cuenta en el momento de medir la gravedad del paciente.
Al tener la clasificación, la información es compartida en red y los médicos pueden realizar la atención de forma ordenada. Los niveles de complejidad son medidos por colores de alerta.
El rojo indica que el paciente pasará directo a sala de reanimación. Es solo cuestión de segundos para tener a todo el equipo de profesionales que brindarán la atención.
Si se tratara de una clasificación naranja, la duración de espera no debe superar los 10 minutos. El color amarillo indica una espera de hasta 30 minutos y aquellos que entran en la categoría azul pueden esperar hasta un tiempo de 180 minutos. En este último caso, se trata de pacientes con alguna molestia de garganta, un resfrío o alguna otra patología que no va a sufrir complicaciones con la espera.
El RAC (Recepción, Acogida y Clasificación) inició en el pediátrico y hoy es el método utilizado en todos los hospitales, la informatización del sistema, pasó por un periodo de prueba, fueron ajustando detalles y los resultados son óptimos.