Sólo con la reducción de gratificaciones, que en administraciones anteriores llegaban hasta 10 por año, el Ministerio ahorró G. 31.000 millones.- Con aplicación de multas a funcionarios y contratados por llegadas tardías, salidas antes de hora y ausencias injustificadas, se reutilizaron unos G. 15.302.640.982 para nuevas contrataciones, sobretodo de personal de blanco.
En administraciones anteriores, el Ministerio de Salud abonaba a funcionarios y personal contratado hasta 10 gratificaciones por año, situación que la actual administración suprimió, ahorrando en este concepto casi 31.000 millones de guaraníes por año, lo que asciende a unos 7 millones de dólares.
Estas gratificaciones orillaban entre los 6.000.000 a 20.000.000 de guaraníes por persona.
“Hicimos un esfuerzo extraordinario en Recursos Humanos. Gracias a este trabajo, conseguimos contratar a 3.520 personas con el mismo presupuesto. Ahora, todas las gratificaciones están reglamentadas. Anteriormente, sólo se daban a los estamentos superiores y a algunos hospitales”, resaltó el Ministro de Salud, Antonio Barrios.
Asimismo, con la aplicación de multas a funcionarios y a personal contratado, entre el 2013 y el 2014, esta administración reutilizó para nuevas contrataciones unos 15.302.640.982 de guaraníes. De este monto, más de la mitad corresponde a multas aplicadas a contratados. Las multas son en concepto de llegadas tardías, salidas antes de hora y ausencias injustificadas.
“Cuando llegué al Ministerio había una mezcla de situaciones y empezamos a trabajar en forma muy ordenada en la parte administrativa, como tiene que ser, porque cuando se manejan números y recursos humanos hay que tratar de ser lo más ordenado posible. Mucha gente criticó en un inicio el hecho de haberle traído a César Pimienta como Director General de Recursos Humanos. Antes de asumir, he tenido reuniones con él y me sorprendió la visión, es una persona que siempre supo de recursos humanos”, agregó Barrios.
El titular de Salud Pública sostuvo que la cartera a su cargo cuenta con 26.800 profesionales de blanco y unos 10.500 administrativos, es decir, casi 37.000 personas. Pero con las vinculaciones, que van de uno hasta tres contratos por persona, llega a casi 44.000.
Igualmente, destacó que en la actual administración se efectuaron 1.072 desvinculaciones y 707 renuncias, “que se dieron porque hemos reforzado los controles”, apuntó.
