- Se trata de la vacuna contra el VPH, es segura, eficaz y gratuita.
- Podrán acceder a esta vacuna niñas de 9 a 17 años.
- La aplicación de tres dosis del biológico garantiza su efectividad.
- Este mal es la segunda causa de muerte en mujeres.
Equipo multidisciplinario del MSP durante la conferencia de prensa.
El cáncer de cuello uterino, segunda causa de muerte entre las paraguayas, puede ser prevenido con la vacuna contra el VPH (Virus del Papiloma Humano), aseguraron autoridades del Ministerio de Salud Pública. En el marco de una conferencia de prensa, un equipo multidisciplinario de esta cartera dio a conocer los beneficios del biológico y ratificó la seguridad y eficacia de la vacuna.
“Paraguay cuenta con la mejor vacuna para prevenir el cáncer de cuello de útero”, explicó la Dra. Sonia Arza, directora del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI). Declaró que los efectos colaterales que produce el biológico son mínimos, como cualquier medicamento. La vacuna es suministrada vía intramuscular, en el brazo, cuyo efecto es solo local. Indicó que se puede observar enrojecimiento y dolor en la zona aplicada.
Dra. Sonia Arza, directora del PAI, junto con la viceministra de Salud Pública, Ma. Teresa Barán (Der.) explicando la seguridad y eficacia de la vacuna contra el VPH.
“En el país se han aplicado más de 360.000 dosis de esta vacuna y ninguna niña presentó efectos adversos atribuibles a la misma. Niñas que recibieron en Australia y Estados Unidos esta misma vacuna que Paraguay ofrece, hoy en día son madres”, aseveró Arza.
La viceministra de Salud Pública, María Teresa Barán afirmó que si se logra vacunar al grupo vulnerable, el impacto de esta terrible enfermedad tendrá una connotación distinta. “Esto es evitar que más mujeres adquieran el virus y fallezcan a raíz de esta patología. Tenemos bases científicas que la vacuna es altamente efectiva”, enfatizó la subsecretaria de Estado.
Para este efecto, la cartera sanitaria dispone de unas 50.000 dosis de vacunas, que fueron adquiridas de forma anticipada el pasado año, mediante el Fondo Rotatorio, a través de la Organización Panamericana de la Salud. Los biológicos serán aplicados al grupo vulnerable, niñas de entre 9 y 17 años de edad, de manera gratuita.
Para la garantizar la efectividad de la vacuna es necesaria la aplicación de tres dosis. La segunda dosis debe colocarse luego de un mes de la aplicación de la primera, y al cabo de seis meses la tercera dosis. “El esquema de inmunización contra este mal debe completarse en el periodo establecido”, refiere la titular del PAI.
Según lo expresó el Dr. Nicolás Aguayo, Un promedio de 500 casos son diagnosticados en el Instituto Nacional del Cáncer, cifra que se mantiene en los últimos tres años. En tanto que la mortalidad por esta patología es alta. Cerca de 30 a 40 mujeres fallecen como consecuencia de esta enfermedad.
“Las niñas están corriendo un riesgo innecesario, puesto que con la vacuna puede evitarse a que contraigan el cáncer de cuello de útero”, manifestó el galeno.
Apuntar a la prevención primaria
Cada 48 horas fallece una mujer por cáncer de cuello uterino, y cada 24 horas una mujer recibe la triste noticia de padecer este tipo cáncer.
Bajo este contexto, la directora general de Programas de Salud, Lida Sosa, considera que se debe apuntar a la prevención no solo del cáncer de cuello uterino, sino también de las lesiones precursoras que pueden desencadenarse en la edad adulta. “Es por eso que insistimos que en la niñez puedan aplicarse las vacunas. Hay suficiente evidencia científica sobre la seguridad de la vacuna. Aquellas madres que tengan dudas al respecto, pueden acercarse hasta el Ministerio de Salud para evacuar sus dudas”, pronunció.
En la oportunidad, el director de la XVIII Región Sanitaria – Capital aclaró que las vacunas que protegen del VPH están disponibles en todos los servicios de salud en cantidad suficiente. Aseguró que se cuenta asimismo con el personal entrenado y capacitado para el efecto.
Se dispone igualmente de los estudios pertinentes para la detección precoz del cáncer de cuello uterino y mama.
