- 2.457 menores de 6 años inmunizados con la SPR.
- El departamento llega a un 75% de su objetivo, hasta el momento.
Vacunadores llegaron por todos los medios a la población a vacunar
Aunque las aguas de los ríos siguen creciendo y muchas de las comunidades reportan familias damnificadas por las inundaciones, los funcionarios de Salud siguen recorriendo las campiñas llegando a las localidades del departamento y garantizando que todos los niños reciban las dosis de vacunas.
En ese contexto, el reporte de la Unidad de Comunicación de la XII Región Sanitaria, Ñeembucú, señala que el distrito de Pilar, llegó a su meta de 2.457 niñas y niños vacunados. “Y se estima que siguen habiendo más niños pendientes de recibir la vacuna; esto debido a que muchas familias de las áreas rurales han emigrado hacia la ciudad de Pilar”, refiere el informe.
Igualmente, resalta que en los otros distritos la situación se torna más difícil, debido a que los caminos se hallan totalmente destruidos y, por ende, solamente se puede acceder caminando, a caballo, en botes o cachiveos.
“Como ejemplo se mencionan dos situaciones anecdóticas: un equipo de apoyo viajó desde la Región Sanitaria hacia el distrito de Alberdi, realizando una travesía muy riesgosa, llegando en doce horas de viaje, debido a que las rutas se hallan totalmente cortadas por las crecidas de los ríos. En días normales, este trayecto se realiza en 5 horas”, se detalla en el informativo.
Por otro lado, un equipo de salud se trasladó desde la Región Sanitaria, acompañados por integrantes de la USF de Tacuaras hasta “Potrero González”. La primera etapa del trayecto para llegar hasta esa localidad se realiza por tierra, luego se debe abordar un cachiveo (elaborado con tronco de árbol). “Estos pequeños botes precisan de un bateador que se encarga de empujar el bote con una larga tacuara que los impulsa y transporta atravesando el esteral durante varias horas, hasta llegar a destino”, añade.
Por último, el reporte enfatiza: “Se destacan con orgullo estos hechos, por todo el sacrificio que implica llegar a estos lugares y, con mucha vocación de servicio, los compañeros visten la camiseta de Salud Pública a fin de levantar la copa de eliminación del sarampión y la rubéola”.
