- Uno en Villa Elisa y otro en Ñemby.
- Ambos tienen nexo con el brote de Kokué Guasú.
- Municipios y la comunidad son corresponsables de la lucha activa contra la enfermedad.
El Ministerio de Salud, a través de la Dirección de Vigilancia de la Salud, confirmó dos nuevos casos de Chikungunya en el Departamento Central, específicamente en los barrios “Salinas”, de Ñemby; y 29 de Setiembre de Villa Elisa.
Al respecto, la Dra. Águeda Cabello, Directora General de Vigilancia de la Salud, expresó que ambos cuadros fueron detectados a partir de las búsqueda activa de casos que fueron detectados en Kokué Guasú, Fernando de la Mora. “Tienen nexo epidemiológico e hicimos investigar febriles en la zona y se tomaron muestras de cuatro a seis detectados”, explicó.
Indicó además que se realiza una verificación en estos barrios, teniendo en cuenta los factores de “extensión y movilidad”, que permitirá determinar la posibilidad de expansión del virus.
Cabello remarcó que los pacientes fueron vistos por profesionales médicos., mientras que se ya se realizan tareas de fumigación con moto-mochilas, utilizadas para fumigaciones intradomiciliarias. A primeras horas de la mañana y al atardecer, se efectuaron ciclos de rociado con máquinas pesadas.
Cabe resaltar además que los trabajos de eliminación de criaderos y limpieza de los barrios, es responsabilidad de la municipalidad, con estrecha colaboración de la comunidad.
Es necesario poner especial atención en el cuidado de la salud ambiental en lugares como escuelas, hospitales y centros de salud, terminales de transporte público, talleres, playas de vehículos incautados por la justicia y en custodia policial, cementerios, cárceles, plazas, clubes deportivos, balnearios y todo otro espacio común sobre cuyo mantenimiento sea responsable la autoridad comunal.
Se realizó el bloqueo de zona, mediante ciclos de fumigaciones.
La recolección y el descarte de objetos inservibles, conocido como descacharrizado, consiste en un conjunto de actividades de eliminación y neutralización de objetos pequeños y medianos (frascos, botellas, latas, neumáticos, tanques, ladrillos huecos, floreros) o grandes (carrocería y piezas de automotores, juguetes viejos, baldes, tarros, cubiertas). Estos objetos podrían servir de criaderos de Aedes aegypti y, generalmente, no son útiles para las personas que viven en la casa ni para la comunidad.
Para mejorar algunos de los problemas ambientales será necesario descartar las fuentes de acumulación de chatarra, el desmalezamiento y eliminación de inservibles, el cuidado en la gestión de aguas superficiales y la identificación de aquellos espacios privados sobre los cuales sea necesario ejercer actividades de control (gomerías, corralones, depósitos).
En el espacio doméstico, la recolección de inservibles se llevará a cabo con distinta frecuencia dependiendo de las condiciones locales como la densidad de vectores, las condiciones climáticas, las condiciones de vida y de la vivienda, además del resultado de las acciones de educación e información orientadas al control familiar de los inservibles.
En situaciones de emergencia, esta actividad debe realizarse inmediatamente después del tratamiento espacial contra mosquitos adultos (fumigación), para no correr el riesgo de transportar pasivamente larvas y huevos hacia sitios todavía no infectados y promover la dispersión activa de los adultos hacia nuevos sitios posibles de cría.
