- Taller fue destinado a periodistas y comunicadores del este del país.
- El objetivo es cumplir con una parte de los requisitos de vigilancia y respuesta del Reglamento Sanitario Internacional.
Comunicadores, periodistas y actores intersectoriales de la zona de la triple frontera de Paraguay, Argentina y Brasil recibieron una capacitación de comunicación de riesgos para las emergencias de salud pública
El taller fue organizado por la Dirección General de Comunicación en Salud y la Dirección General de Vigilancia de la Salud, con la cooperación del Grupo Técnico Salud de Itaipú y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en el marco de un proyecto para fortalecer las capacidades básicas de salud de frontera. Será facilitadora, la especialista nicaragüense Vilma Gutiérrez, y el equipo de comunicación del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
“Estamos haciendo este trabajo para la implementación del reglamento sanitario internacional. Fundamental es el fortalecimiento de comunicación de riesgo para responder oportunamente a un evento adverso a la Salud Pública. La comunicación es un vehículo para salvar vidas, con información pública y veraz emitida por autoridades”, explicó Gutiérrez.
Promover y facilitar una mejor comunicación ante emergencias de salud pública, fue el objetivo, a través del desarrollo de capacidades básicas de comunicación de riesgos como parte de los requisitos de vigilancia y respuesta del Reglamento Sanitario Internacional. “Este taller sirve para recoger sugerencias y comentarios; convertir los medios en tribuna pública para medir las situaciones de riesgo”, aseveró.
Abordada sobre las informaciones falsas emitidas generalmente por redes sociales, Gutiérrez manifestó que constituye un gran desafío sobre perfiles falso. “Es una de las herramientas más utilizadas, deben ir a sitios oficiales para tener información oportuna, porque puede ser que la información que puede significar la vida o la muerte”, dijo.
A través de ejercicios de simulación, debate y análisis, los participantes fortalecieron sus habilidades en comunicación, la complejidad de la comunicación de riesgos y las dificultades del entorno de una emergencia de salud pública, principalmente en fronteras y compartir experiencias del trabajo a nivel local.
