- Lo ideal es mantener el sistema de climatización en 22 y 24 ºC.
- El contagio es sencillo y frecuente, ya que se da por la expulsión de pequeñas secreciones.
- No solo aparece el resfrío si no también puede desembocar en una influenza.
- Una dieta inadecuada, consumo de poco líquido y otros padecimientos debilitan las defensas y exponen al organismo a las afecciones respiratorias.
La forma de contagio es sencilla, se da a través de secreciones que se expulsan al toser, hablar o estornudar.
La gripe de verano aparece debido a los cambios bruscos de temperatura registrados en nuestro país sumado a la excesiva o mala exposición al aire acondicionado.
Estas y otras circunstancias favorecen a la aparición de enfermedades respiratorias como resfrío y también influenza o gripe.
Según especialistas de la cartera sanitaria, la mezcla propicia para molestias respiratorias es una dieta inadecuada, el consumo de pocos líquidos, el estrés u otro padecimiento que debilite las defensas del organismo.
Como métodos preventivos se recomienda la práctica de hábitos higiénicos como el lavado frecuente y correcto de las manos. Además de tener en cuenta que cuando se estornuda o tose se debe tapar con un pañuelo o con el antebrazo para evitar la dispersión de los virus.
También, en lo posible evitar los cambios bruscos de temperatura utilizando abrigos livianos y no permaneciendo por tiempo prolongado en lugares con aires acondicionado con muy baja temperatura. Lo ideal es mantener el sistema de climatización en 22 y 24 ºC. Asimismo, se debe evitar la exposición prolongada al sol.
En cuanto a las personas que ya presentan síntomas gripales, lo aconsejable es permanecer en habitaciones ventiladas donde se elimine el aire viciado y mantener una temperatura ideal, y por supuesto visitar el centro asistencial más cercano.
