- Exceso de sal produce hipertensión, principal causa de derrames, infartos y fallas cardiacas.
- También predispone a la aparición de osteoporosis, cáncer de estómago, enfermedad renal y cálculos, así como obesidad, diabetes y Alzheimer.
La mayor parte de sal que consumimos se encuentra en los alimentos que adquirimos. En este sentido, el Ministerio de Salud Pública a través de la Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles, en el marco de la “Semana Mundial por la sensibilización de la sal”, aconseja ante todo disminuir el consumo de este mineral. Señala que a la hora de adquirir alimentos envasados o enlatados, leer las etiquetas y elegir aquellas que contengan menos sal.
La Semana Mundial por la sensibilización de la sal inició el 10 de marzo y se extenderá hasta el 16.
Profesionales del ámbito de la salud explican que el exceso de sal en las comidas contribuye al incremento de la presión arterial, principal causa de los accidentes cerebrovasculares (derrames), ataques cardiacos (infartos) y fallas del corazón, causa más comunes de muerte y enfermedad en el mundo.
Una dieta alta en sal está vinculada a otras enfermedades, como la osteoporosis, el cáncer de estómago, enfermedad renal y cálculos renales, la obesidad, el aumento de los síntomas del asma, las enfermedades de Meniere (Enfermedad del oído), de Alzheimer y la diabetes.
“Aproximadamente el 30% de las personas con hipertensión tendrían una presión arterial normal y el resto tendría un mejor control de su presión arterial si redujesen la ingesta de sal a un nivel saludable”, sostienen expertos de la dependencia técnica del Ministerio.
La última encuesta de factores de riesgo de enfermedades no transmisibles realizada en el 2011, señala que en el país, el 46% de la población es hipertensa, y uno de cada diez personas encuestadas admitieron un consumo excesivo de sal en su alimentación.
El tema de este año es “Reemplace la sal” que tiene como objetivo mostrar que hay opciones más saludables para los consumidores cuando compran alimentos y quieren menos sal.
Al momento de añadir sabor sin añadir sodio, es recomendable utilizar hierbas o especias en vez de sal para sazonar los alimentos. Recomendar el romero, orégano, albahaca, pimienta, ajo, curry, vinagre o zumo de limón.
Principales fuentes de sal o sodio en la dieta:
- Panificados, Carnes como asados, hamburguesas, papas fritas, pizzas, sopas en sobres, sándwiches, quesos, embutidos, bocadillos (snacks), agua mineral con alto contenido de sodio.
Para reducir el sodio de su dieta:
- Lea las etiquetas nutricionales al ir de compras para saber cuáles son las opciones de sus alimentos favoritos con menos sodio.
- Limite el consumo de alimentos procesados ricos en sodio.
- Si sale a comer pida que no le agreguen sal a su comida.
- Siempre que sea posible preparar la propia comida, no añadiendo a los alimentos mientras se cocinan.
- Evitar el uso de salero en la mesa.
- Tener precaución con los vegetales, eligiéndolos frescos o congelados (sin salsa) y si son enlatados vigilar que sean bajos en sodio y sin sal añadida.
- Escoger aperitivos y meriendas sin sal y aumentar el consumo de frutas de temporada.
- Consumir preferentemente alimentos frescos, en vez de enlatados o procesados.
- Tener muy en cuenta los condimentos que a menudo contienen sal, usando preferentemente aceite de oliva y vinagre, frente a otros aderezos envasados.
Para ampliar información contactar con Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles, al Telefax: (021) 222-013.
